Queridísimos seres:
¡Desde el corazón del Sol Yo los saludo con todo mi amor,
sabiduría y poder! La unidad de vida es el mayor principio divino que ahora
está siendo re-despertado en las mentes y corazones de toda la humanidad, así
esta verdadera hermandad espiritual entre ángeles, elementales y humanidad
puede, y podrá una vez más, ser manifestada y por siempre sostenida sobre este
hermoso planeta Tierra. Cada vez que ustedes piensan en el Sol, conocen que el
amado Helios y Yo estamos con ustedes, ampliamente entendiendo que, en
realidad, nosotros estamos siempre con ustedes. ¡Especialmente cuando están
centrados dentro de la inmortal, victoriosa, llama triple de vida y son uno con
vuestra Presencia, ustedes son plenamente conscientes de este hecho!
Esta mañana, deseo
llevarlos a un viaje. Primero, por favor inspiren profundamente y exhalen,
aquieten la mente y tomen una posición confortable. ¡Entiendan que mientras
caminan esta bendita Tierra, también están caminando a través del universo!
Busquen en vuestras memorias y elijan un lugar en el reino de la naturaleza que
tenga gran significado para ustedes. Podría ser una pradera plena de
relumbrante luz o un verde bosque irradiando su exquisita belleza y perfección.
Ahora, véanse caminando a través de este lugar, contemplando y bendiciendo
todas las formas de vida que componen esta magnífica creación. A lo largo del
camino, encuentran una flor caída en el suelo, separada de su tallo, incapaz de
recibir la balanceada nutrición de los cuatro elementos.
Inmediatamente, un
sobrecogedor sentimiento de compasión y amor sale de vuestro centro corazón y,
con un gentil y amoroso gesto levantan esa flor. Luego la llevan junto a
vuestro corazón, deseando que hubiera algo que pudiera salvar a esta exquisita y perfecta forma de vida. Ahora relacionan
esta experiencia con la del amado Sanat Kumara cuando por primera vez observó
la Tierra y sostuvo sus muchas magníficas formas de vida. ¿Pueden comenzar a
sentir la plenitud del amor de este gran ser de luz que apareció para bendecir
este planeta en ese tiempo?
¡Ahora, pónganse cómodos bajo un cercano árbol y aprendamos
algo más acerca de la naturaleza de esta amorosa flor! Mientras respiran
profunda y rítmicamente, sientan cómo
respira todo vuestro cuerpo. El aire se mueve a través de ustedes desde la cima
de la cabeza hasta la punta de los pies. Vuestra aura y cuatro vehículos
inferiores son saturados por este elixir dador de vida. Mirándose, observen la
luz creciendo dentro de la llama de vuestro corazón. Lentamente ella se expande
saliendo hasta envolver toda la flor, ofreciéndole la energía añadida que han
atraído hacia vuestro ser a través de la actividad de la atención sobre su
perfección. Ustedes están trayendo confort y vida en grado sumo a esta hermosa
expresión elemental de la naturaleza, asistiéndola a cumplimentar su divino
plan por un tiempo más.
Cierren los ojos y entren a un profundo estado de
contemplación y meditación. Aceptando la energía y radiación que emanan de esa
flor, aprenden que la flor que ven con los ojos físicos es el cuerpo físico de
una maravillosa forma de vida elemental de la naturaleza. Este ser también
tiene un cuerpo etérico, dentro del cual almacena todo su trabajo para el
planeta, como así también todos los eventos que están teniendo lugar alrededor
de esta forma de vida. Sin tener en cuenta lo que pasa con la flor, este ser
elemental muestra una habilidad mental y emocional para sostener su patrón
inmaculado de expresión, y manifestarlo perfectamente. Puede no tener un
desarrollado cuerpo emocional como el de ustedes, amados, pero con todo, él
tiene una naturaleza emocional, porque ¿podría existir tal belleza sin emoción?
Los sentimientos de un ser elemental deben evolucionar, porque su habilidad
mental para sostener por más tiempo una expresión física, aumenta a través del
poder de divino amor como el cohesivo poder en este universo.
Amados de Dios, piensen ahora en los elementales que
componen y habitan dentro de vuestros cuatro vehículos inferiores, siempre
esforzándose para trabajar en perfecta armonía unos con otros. Esta no es
siempre una tarea fácil a realizar, porque los cuerpos inferiores pueden estar
cargados con energías mal dirigidas a través de vuestras acciones y reacciones
por eones de tiempo, lo que eventualmente puede evolucionar dentro de un patrón imperfecto.
Una vez establecidos
vuestros cuatro vehículos inferiores en orden divino, permitiéndoles sostener
únicamente patrones de energía puros y perfectos, nada de una naturaleza imperfecta
puede afectarlos porque no existen en esos vehículos ninguna energía que
alimente la sustancia modelada imperfectamente. Puede que hayan experimentado
esto cuando alguien les dijo algo que hubieran podido introducir energía negativa en la conciencia, pero ustedes no
reaccionaron a esto para nada. Lo que
verdaderamente tuvo lugar fue que, a través del medio de una conciencia
clara, la energía enviada fue instantáneamente purificada cuando alcanzó
vuestro ser. ¡Cuando ustedes son la Presencia de Dios en acción, sienten y
expanden la alegría de la creación en todos los reinos, sabiendo que vuestra
vida trae un único e inmensurable regalo al universo!
¡Amados hijos del Sol, ponderen mis palabras mientras así
agradecen a los seres elementales que son la expresión física de vuestro
espíritu en esta Tierra, por la oportunidad de aprender más acerca de cómo el
bendito reino elemental sirve tan
fielmente a la vida en este planeta! El tiempo que han pasado aquí en
este magnífico retiro de los reinos angélicos y de la naturaleza, también los
ha bendecido con más profundas percepciones acerca de la relación con los
amados seres elementales de la Tierra y de los planos superiores. Yo pido que
puedan llegar a atesorar vuestros cuatro vehículos inferiores, especialmente el
vehículo físico, en una forma más profunda, justamente como mi amado y yo lo
hacemos, eligiendo percibir sólo la belleza y perfección de vuestra plena
expresión.
¡El amado Helios y Yo ahora los cargamos con la iluminación
que requieren para permanecer en el sendero espiritual de servicio
desinteresado, y experimentar el gozo de vivir en la Tierra! ¡Pueda cada uno de
ustedes retornar al hogar colmado por la iluminada fe del Arcángel Miguel
y la naturaleza de amor del Elohim
Orión!
Señora Vesta
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