jueves, 28 de agosto de 2014

Acerca de la liberación del karma



YO SOY Kuthumi, habiendo llegado para la instrucción de sus almas.
He venido este día para darles una pequeña Enseñanza, que espero sea muy útil para ustedes y les proporcione mejor entendimiento de muchas cosas. Yo mantengo el concepto inmaculado para cada uno de ustedes. Así, es mas fácil comunicarme con ustedes y observar cómo se refleja en sus vidas mi actitud hacia ustedes.
¿Han notado la influencia que tienen en otras personas, conocidas o desconocidas, en sus amigos, personas cercanas y niños? ¿Se han mirado a ustedes mismos desde fuera?
Vamos a imaginarnos que no están de muy buen humor. Están llenos de hostilidad y sospechas. Parece que todos están mintiéndoles, tratándolos mal. Es verdad que ha habido tales estados de conciencia en sus vidas,¿no es así? Ahora vamos a analizar cuidadosamente de qué manera su estado afecta a los que están a su alrededor.
Así, llegan al trabajo y empiezan a transferir su estado a la gente a su alrededor. No piensan cosas muy agradables de ellos. Gradualmente, la gente lee subconscientemente sus vibraciones y empiezan a mostrar eso que ustedes ven en ellos. ¿Entienden lo que digo? La energía de mala calidad que está presente dentro de ustedes los lleva a un estado interno de baja calidad. Sus cuerpos mentales y emocionales empiezan a vibrar a esa frecuencia que corresponde a la energía que ha sido activada dentro de ustedes en un momento dado.
Ustedes saben que sus cuerpos energéticos contienen registros de todos los actos realizados por ustedes. Y cuando llega el momento, uno u otro registro kármico se activa. Así entran en el estado de conciencia que crearon con anterioridad con sus elecciones incorrectas en el pasado. Ahora, llega el momento cuando otra vez aparece la energía de baja calidad creada por ustedes y que vive en sus cuerpos energéticos. Ahora depende de ustedes el ser capaces de trabajar esta energía, enderezarla, neutralizarla o complicarán su estado kármico.
Cuando están armados con la sabiduría del funcionamiento de la Ley del Karma, serán capaces de aprender a reconocer todos los estados de baja calidad que se empiezan a manifestar dentro de ustedes. Gradualmente, ustedes dominarán el arte de observar cómo es que surge uno u otro estado de baja calidad, se activa y penetra en sus cuerpos mentales y emocionales. Cuando conozcas a tu enemigo, serás capaz de manejarlo.
Si conoces la enfermedad, es suficiente tomar la medicina a tiempo y su ataque será evitado. Sus cuerpos sutiles también están enfermos. Ellos mantienen heridas de acciones pasadas incorrectas. Y ustedes sólo tienen que encontrar el antídoto o medicina para los estados de conciencia de mala calidad.
Deben aprender a atraparse en el momento cuando un estado de conciencia de baja calidad está empezando a agarrarse de ustedes. Deben estar siempre alertas y exactamente en ese momento cortar cada manifestación de las energías negativas.
Si tratan de manejar su estado de baja calidad con la fuerza de su voluntad o con la ayuda de métodos psicológicos, esto los ayudará poco. Es necesario que entiendan que este estado lo han creado en el pasado ustedes solos. Y ahora quieren deshacerse de esta imperfección. Quieren liberarla. Cuando logran ir a un estado de conciencia correcto y dirigen el flujo de energía Divina en ustedes en la dirección correcta, son capaces de neutralizar sus pasados depósitos kármicos negativos. El mecanismo entero de rectificar sus imperfecciones internas está presente dentro de ustedes. Sólo es necesario confesar que la imperfección está presente en ustedes y que quieren deshacerse de ella.
Todo depende en la carga de su karma, en qué tan fuerte sea la energía negativa que se ha asentado en ustedes. Y si manejan un problema kármico pequeño, entonces es suficiente mantener su atención por una sola vez y se irá.
Sin embargo, si se cruza por su camino un gran problema kármico, la cualidad que deben trabajar en esta encarnación, entonces necesitarán repetir el intento muchas veces, a veces por muchos años.
No existe cualidad negativa o defecto que no puedan manejar con la ayuda Divina. Dios siempre tiene una oportunidad para ustedes de manejar cualquier imperfección por ustedes mismos. Y cuando sienten que las instrucciones dadas por mi operan de manera irreprochable, serán capaces de deshacerse gradualmente de todas sus imperfecciones.
Vendrá un día en el que ya no serán insultados mas, si antes era común que los insultaran.
 Vendrá un día en el que dejarán de envidiar, si la envidia ha sido común en ustedes.
Vendrá un día en el que dejarán de sentir celos, si los celos eran típicos de ustedes.
De igual forma serán capaces de de deshacerse de la depresión, irritabilidad, irascibilidad, enojo y muchas otras cualidades no divinas.
Y cuando sean capaces de manifestar sólo cualidades Divinas, el mundo entero les mostrará su lado Divino. Es necesario para ustedes concentrar su atención y esfuerzos en ustedes mismos, en su estado interno y el mundo entero a su alrededor cambiará por sí mismo.
Yo he hecho un cambio mientras les daba esta Enseñanza. En realidad, todos ustedes están muy relacionados en el mundo en el que viven. Hay lazos kármicos muy fuertes que los conectan con su familia, el país en el que viven y todo el planeta. Por lo tanto, simultáneamente con el proceso de limpieza de sus propias acumulaciones kármicas, deben cuidar que otras personas aprendan la Ley del karma y que aprendan a trabajar su karma.
Después de que el conocimiento de la Ley del karma y los métodos para trabajarlo penetren en las conciencias de un porcentaje crítico de la población de la Tierra, la situación en el planeta empezará a cambiar ante sus ojos.
Su ignorancia y flojera es lo que más los atrasa. Todos los mecanismos y conocimientos fueron dados hace mucho tiempo en los dictados que proporcionamos a través de esta mensajera y a través de muchas otras personas, que en distintos momentos nos han estado sirviendo como mensajeros.
Ahora, el momento ha llegado de partir. Es una lástima. Yo espero que haya nuevas reuniones en el futuro.

YO SOY Kuthumi, un instructor de sus almas.