miércoles, 24 de agosto de 2011

Los serafines protegen a los hijos de Dios

Serapis Bey




He venido, entonces, mientras los serafines se congregan aquí en números casi incontables.
He llamado a los serafines desde el centro de Dios. Desde los anillos de luz del Gran Sol Central marchan, conducidos por Justinius; y vienen para la protección de todos los siervos de Dios sobre la tierra.
Deberíais estar sorprendidos al descubrir la piedad y la profunda santidad de seres que en esta vida no son ni judíos, ni cristianos sino musulmanes, hindúes o budistas parsi-zoroastrianos Cualquier llamado, cualquiera que sea su vínculo, amados, existen seres santos de Dios en todas las comunidades religiosas. Sabed, entonces, que los serafines carecen de discriminación religiosa y acuden a proteger a los corazones de Luz, que a través de sus oraciones diarias, ya han establecido un cordón de luz que se extiende hasta el infinito.
Las maquinas de la guerra están resonando. La retórica de la guerra es pronunciada diariamente. Y, en los corazones de muchos, está alojado el deseo de la contienda, no de la paz. Por lo tanto, que aquello que el hombre ha invocado se manifieste como su decreto, puesto que la Ley es la Ley. Y así las evoluciones de la tierra continúan permitiendo a los ángeles caídos dictar las condiciones de guerra y paz, entonces yo digo, aún los serafines protegerán sus ojos de los holocaustos que continuaran sucediendo.
Vosotros que estáis contados entre los niños de Dios, hijos e hijas de Dios y aún ángeles servidores ,venís a la tierra pera ejercer un ministerio, Yo Serapis, os digo que vuestro corazón debe ser el punto central de un fuego que se abraza a sí mismo y poder ser utilizado por las fuerzas del Imán del Gran Sol Central para atraer a la gente de Luz de esta tierra hacia una unión consumada de unidad de propósitos, ideales, motivos y visión por el Ojo Omnividente de Dios.




Este Ojo Omnividente atraviesa en este ciclo del Cuarto Rayo Secreto, dentro de los ciclos de catorce meses. Así, el Ojo Omnividente de Dios, penetra por el corazón de Amitabha.
Podéis comprender, entonces, cuán enorme bendición esta sobre vosotros, que podéis tener la oportunidad para que esa visión de dos ojos se convierta en una. Seguramente este es el ciclo de preparación de la Luz del Fuego Sagrado alistando los chacras para la elevación de la Luz de la Madre.
Muchos perecerán por falta de visión. Confío en que ninguno de vosotros sea contado entre esos, que son numerosos .
El día vendrá en que cada hombre, mujer y niño deba ver por si mismo, deba atravesar el caos y la Antigua Noche sea regresada a la tierra.
Las arenas del reloj caen para todos, aunque, ni el hombre ni la mujer saben, en lo exterior, cuántos granos de arena quedan arriba y cuántos abajo. Buscad resolveros de tal manera que cuando vengáis a nuestro retiro no necesitéis permanecer dos mil años en las octavas inferiores tratando con aquellas cosas que hoy
pueden ser realizadas mediante el fiat de vuestra Palabra hablada y vuestra fidelidad a la Palabra que habéis entonado.
Creed que vuestro fiat, implora el pleno poder del Supremo Dios y aceptad vuestra libertad amados!