sábado, 30 de mayo de 2015

El día de nuestro cumpleaños


El día del cumpleaños es un nuevo comienzo, un limpio pizarrón, un fresco inicio, porque el ciclo de cada corriente de vida completa un circuito cada trescientos sesenta y cinco días y la energía del mundo del individuo cierra el círculo de experiencias en el día precedente al de la fecha del nacimiento.
En el día del aniversario de la encarnación o creación del espíritu, se libera una nueva pulsación de Luz y Vida hacia los vehículos inferiores. Entonces, desde la Presencia llega un añadido ímpetu con la expresa esperanza de que en el año siguiente el Divino Plan encuentre una mayor expresión del individuo o de los seres. Esta es la razón por la cual es comúnmente notado, que en el período precedente al día de nacimiento, hay una disminución o reducción de la energía de vida y vitalidad. A su vez, el período que le sigue inmediatamente al día de nacimiento es usualmente el más magnífico en desarrollo espiritual y bienestar interno.
Como la encarnación del espíritu da una nueva oportunidad para que ese ser desarrolle su naturaleza espiritual, así, en un ciclo menor, el de cada aniversario de nacimiento es un nuevo comienzo y una gran cantidad de la acumulación de la corriente de vida que el individuo ha atraído sobre sí mismo, es disuelta en ese tiempo. Es también el privilegio y la oportunidad de la Única Universal Conciencia ofrecer los regalos de todas las Cualidades Divinas a esa corriente de vida, así como los seres no ascendidos ofrecen sus regalos en el estado material. Cada persona que pasa a través de las puertas de un nuevo cumpleaños, recibe una efusión de cada ser ascendido y la práctica de expandir regalos aquí en la Tierra es sólo un pálido reflejo de la experiencia interna.
Cuando un individuo, o ser, es un aprendiz en el verdadero sendero espiritual, recibe una enorme efusión cósmica en su cumpleaños, haciéndolo el día más sagrado del año. En vuestro cumpleaños la corriente de vida es halagada por todas las fuerzas Cósmicas del Universo en Eterna Libertad. La riqueza, la opulencia, la iluminación espiritual que son ofrecidas a ustedes permanecerán como una parte de vuestra eterna identidad por todo el tiempo. Por esta razón, aprovechen cuando este santo día llegue y báñense en el esplendor de la Presencia de lo Divino.
Pueda la tremenda efusión de bendiciones fluir dentro de la verdadera esencia de vuestra alma y espíritu, pueda asistirlos ahora y para siempre en la plena y completa unión con vuestro ser superior y la Única Universal Conciencia.