Generalmente cuando se suscita una urgencia, el modo de
actuar "sancionado por la sociedad " es que con " todo derecho
" te pongas a correr de un lado
para otro, a gritar, a llorar o cualquier otro movimiento descontrolado del
cuerpo actual. Y todos asentirán con la cabeza porque la persona tiene derecho de comportarse así, " fíjate lo que
le pasó". Ahora comparemos este critero " socialmente
aceptado" con lo que nos dice a ese
respecto la Señora Astrea :
“ Recuerden que cuando es menester hacer algo urgente, es
entonces hora de aquietarse y dejar que el Gran Poder del Amor Divino desde la
" Magna Presencia YO SOY" se vierta para armonizar su mundo. Luego,
lo que ustedes pidan será hecho, sea a través de otros individuos en el mundo o
a través de sus Llamados a la " Presencia". Pero si están agitados,
resentidos, iracundos y angustiados, su mundo emocional estará tan perturbado
que el Poder de la " Presencia" . Sus Corrientes de Energía,
no podrá fluir y salir a su mundo para realizar lo que se requiere. ¿Acaso no
lo ven, Mis amados? Es bien fácil de entender y poner bajo control y dominio,
siempre y cuando se le preste atención a alguna de las cosas aparentemente
chicas de la Vida.Las cosas pequeñas que la mayoría de las personas pasan por
alto y que no consideran importantes, son precisamente las que conforman las
grandes limitaciones y zozobras. Sólo una palabra pronunciada sin ningún tipo
de vigilancia, quizás sin ninguna mala intención, otro la recoge y le añade la
firme aseveración de un mal cometido. De esta manera, se aumenta, se expande y
crece hasta que una tragedia termina resultando de todo eso. Es así como las
cosas pequeñas, inadvertidas al principio, avanzan y conforman un remolino. Tal
es el caso en cada una de sus avocaciones en la Vida. De alguna manera, ustedes
han permitido que estas cosas, a través del poder de su atención, alimenten su
Vida en ellas para acosarlos, limitarlos y perturbarlos.Si tan sólo recordaran
dos cosas y fueran lo suficientemente dinámicos con ellas, podrían liberarse: "
Allí donde está tu atención, allí estás tú “ y “ En lo que pones tu atención,
en eso te conviertes ". Esto es lo más sencillo que hay en la Vida, pero
constituye el Más Grande Poder conocido para el hombre. Aquello sobre lo cual
decides fijar tu atención, en eso te convertirás porque no hay nada en el
Universo que pueda impedirlo.